miércoles, 25 de julio de 2007

Ahora resulta que los paras no quieren negociar. Están protestando porque no se les reconoce la sedición en vez del concierto para delinquir. Mantendrán congelado el proceso con el gobierno y no asistirán a las audiencias de justicia y paz. ¿Nos tenemos que aguantar eso?

No es justificable que los paramilitares incumplan con los compromisos que exige la ley de justicia y paz, y no es justo tampoco que las víctimas de esos señores sean los perjudicados. Si existe un proceso de paz es para cumplirse, y no para estar chantajeando a cada momento. Las audiencias deben continuar, se debe decir toda la verdad, las víctimas tiene derecho a reparación.

Si es sedición o no, las autodefensas no lo deciden, lo decide la justicia. Y si no les gusta pues lastima por ellos. Por que si siguen con esa actitud de víctimas, cuando en realidad son unos delincuentes, deberán perder los beneficios que tienen.

También es lamentable que el presidente salga a defenderlos, cuando debería exigirles que cumplan con sus deberes. Con ese comportamiento solo les sigue dando razones a los de la oposición para llamarlos "paraco".

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